«Ha fallecido Javier García Cuesta una de esas personas que tienes como vecino y que no sabes que con la vida que ha tenido puedes hacer una serie. Con él se va uno de los últimos miembros de aquella generación de finales de los sesenta que fueron los primeros INEF, los primeros entrenadores nacionales de balonmano, los primeros jugadores internacionales, los primeros de muchas cosas, que desde la nada tuvieron la ambición, la dureza y la valentía de salir al mundo.
Participó, con la selección nacional (no le gustaba nada eso de los Hispanos), en los juegos Olímpicos de Múnich 72 los de Mark Spitz, los de los atentados del comando palestino contra la delegación israelí, los Juegos en los que por primera vez se jugó al balonmano a 7, tal como ahora lo entendemos, aquellos locos bajitos que salieron a pegarse con nórdicos, alemanes, soviéticos y yugoslavos. Marcaron el camino que ahora seguimos, pensando que es normal lo que en aquellos tiempos era extraordinario.
En las sobremesas de las comidas de verano de los 70 Javier era una leyenda y alguna vez venía desde USA a compartir mesa y tertulia con sus antiguos compañeros del CODEMA a donde había ido a estudiar de niño desde su Mieres natal y amigos del balonmano gijonés y asturiano, cuando ya había pasado del Atlético de Madrid y ganado una liga como preparador físico de Luis Aragonés y estaba en el Cosmos de Nueva York con un Pele en retirada. Posteriormente fue seleccionador nacional de USA y ahí empezó su carrera como técnico de selecciones nacionales de balonmano de Egipto, Portugal, Brasil y por supuesto España en Barcelona 92. Y no menos importante seleccionador del Principado de Asturias en aquel equipo que ganó a Brasil en el 2002, un equipo que perfectamente podría haber participado en un mundial.
Su palmarés deportivo como olímpico, jugador, técnico y director técnico es historia que deberíamos conocer los amantes del deporte. Pero sobre todo estaba ese perfil humano de gente dura, con personalidad, irrepetible que nos dejan un legado muy difícil de llevar con la dignidad debida a los que aquí quedamos.
Uno de mis mayores privilegios como presidente fue acompañarle en una charla en el ultimo curso de monitores de balonmano el pasado marzo en el salón de actos del Colegio Corazón de María de Gijón, sabía que tenía mucho que aportar y vaya si lo hizo, habló de cosas como: puntualidad, imagen, seriedad, conocimiento, comunicación y sinceridad, ética y familia, todo lo necesario cuando ahora nos entretenemos en lo contingente. Dio la charla como si se estuviese dirigiendo a un congreso del comité olímpico, pero sin olvidar esa ironía y sentido del humor astur que nunca perdió, así era él.
Fue muy emocionante, cuando con la clarividencia que te da una vida llena, dijo que le hacía ilusión estar allí al lado de aquellas canchas donde siendo un niño había empezado todo para “acabar,” que se cerraba un círculo.
DESCANSA EN PAZ JAVIER GRACIAS POR TODO»
Este artículo, escrito por el presidente Juan Arribas, se publica hoy en la edición impresa y digital del diario El Comercio como homenaje a la figura y legado de Javier García Cuesta, cuyo recuerdo permanecerá siempre vivo en el balonmano asturiano.